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Bolivia advierte en la ONU que habrá ‘economías destruidas por Covid-19

El gobierno de Luis Arce continúa su cruzada y esta vez planteó en el Foro sobre Financiamiento para el Desarrollo de la ONU la propuesta de alivio de la deuda a países en desarrollo y la condonación o refinanciamiento de la deuda externa a nivel global para encarar la recuperación económica tras la crisis dejada por la pandemia del COVID-19.

El canciller Rogelio Mayta hizo la propuesta, pero ahora advirtió de la necesidad de encarar también con esfuerzos globales y equitativos la pandemia porque de no hacerlo la vacunación contra el virus en el mundo concluirá en 2022 cuando “las víctimas de la pandemia sumen por millones y cuando la economía de varios países esté destruida”.

Describió en el Consejo Económico y Social (ECOSOC) de la ONU el panorama crítico que puede avecinarse de no cambiar la actual tendencia. Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), se aplicaron 700 millones de vacunas contra el virus, de las que el 87% están en países de ingresos altos y medio altos. Solo el 0,2% en países de recursos bajos.

“En promedio en países de altos ingresos 1 de 4 personas recibió la vacuna, mientras que en los países de ingresos bajos 1 de cada 500. En este escenario de inequitativa distribución de vacunas, medicamentos e insumos sanitarios salen perdiendo los de siempre, los pobres”, sentenció Mayta.

Ante ese panorama, llamó a todos los países a hacer esfuerzos mancomunados para revertir la actual tendencia con la finalidad de no solo salir de la crisis sanitaria sino también de la económica con un paquete de medidas de alivio a la deuda externa.

Como lo hace en diferentes foros, propuso a nombre de Bolivia un acuerdo global de alivio de la deuda en favor de los países en desarrollo, la condonación o refinanciamiento de la deuda externa a nivel global, la recuperación económica con un enfoque de desarrollo integral y sostenible, y la transformación democrática de los organismos financieros mundiales.

Organismos internacionales como el Fondo Monetario Internacional (FMI) cifraron en 5,5% el crecimiento de Bolivia.

Mientras que en materia de lucha contra el COVID-19, la firma que distribuye la vacuna Sputnik V incumplió con el compromiso de entrega de un lote de 1,7 millones hasta fines de marzo. El ministro de Salud, Jeyson Auza, informó que seguirá gestionando vacunas para garantizar cobertura de toda la población objetivo.

Uno de los factores identificados para la escasez del inmunizante, fue el acaparamiento por parte de los países industrializados.

FUENTE: LA RAZÓN

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